La competencia de handball más imponente del norte de la provincia llegó a su fin con tres baraderenses que levantaron la copa del Torneo Clausura «Campos del Libertador» representando a equipos nicoleños.
Fiscalizado por la Asociación de Balonmano del Norte de la Provincia de Buenos Aires, la liga llegó a su fin con un sobresaliente nivel y un notable crecimiento desde su estructura, organización y también juego. El handball estuvo en lo más alto en un año en donde Baradero no sólo estuvo presente con la Escuela Municipal de Handball en las categorías inferiores, sino también, con tres oriundos de la ciudad que llegaron a la gloria defendiendo su camiseta.
Por el lado femenino, Pamela Lobato jugó una temporada con la camiseta de Don Bosco, con la que se consagró en varias oportunidades y en esta ocasión no fue la excepción. La exjugadora de Atlético cumplió un papel preponderante en los últimos tres partidos de serie frente al duro Regatas de San Nicolás, y tras forzar el tercer partido en una etapa preliminar dura y muy pareja, el equipo vestido de azul se consagró campeón, y la baraderense volvió a festejar a lo grande, esta vez, en la categoría cadetes.
Un genuino y fiel trabajo se transforma en logros para el Club Somisa, que buscando y comprometiéndose esta vez lo logró. Y también lo lograron dos jugadores locales: Franco Fiorito y Diego Bugdahl que representaron una vez más al elenco nicoleño y fueron esenciales en su paso hacia la gloria somisera. Un club que hizo un extraordinario torneo y venció en la final a Belgrano por 31 a 25 y un marcador que se estampó en la historia y en la felicidad fruto de lo cosechado.
